Cada año, se calcula que 30 millones de pasajeros aéreos europeos enfrentan retrasos de vuelo y cancelaciones. De esta cifra, solo alrededor del nueve por ciento conoce sus derechos de compensación. De acuerdo a la reglamentación de la UE 261/2004, ahora existen reglas comunes en relación a la indemnización y asistencia para los viajeros aéreos en caso de que se les niegue el acceso para abordar, o presenten cancelaciones y retrasos de vuelo de hasta 3 horas o más. La normativa establece un conjunto de derechos para los pasajeros cuando un vuelo se estropea sin que sea su culpa.

Puedes presentar una reclamación para una indemnización bajo la (CE) 261, si:

  • Volabas a un aeropuerto de la UE con un transportista de la UE
  • El incidente ocurrió dentro de los últimos 6 años
  • Despegabas de un aeropuerto de la UE con cualquier transportista
  • La aerolínea sigue operando
  • El incidente no se debió a «circunstancias extraordinarias»

Como puedes ver, existe un factor por el cual no puedes reclamar una indemnización: las circunstancias extraordinarias. A continuación, explicaremos lo que constituye una «circunstancia extraordinaria», lo que podría impedirte presentar una reclamación para que tu aerolínea te compense.

¿Cómo define la (CE) 261 una «circunstancia extraordinaria»?

En la normativa establecida por la (CE) 261 una «circunstancia extraordinaria» está determinada por dos factores:

  • Está fuera del control de la aerolínea
  • No es inherente a la actividad regular de la aerolínea

En otras palabras, es una situación que no controla la compañía aérea y que no podría evitarla bajo circunstancias normales. No hace parte de la actividad normal de la misma.

¿Cuáles son algunos ejemplos de «circunstancias extraordinarias»?

Si buscas una compensación de un vuelo de la UE, encontrarás que los ejemplos de circunstancias extraordinarias son numerosos. Por lo general, el mismo término aplica a cualquier cantidad de escenarios donde la cancelación o retraso de un vuelo ocurrió por algo fuera de lo normal. Esto incluye:

  • Riesgos para la seguridad
  • Disturbios militares
  • Actos de terrorismo o sabotaje
  • Condiciones metereológicas extremas
  • Desastres naturales
  • Huelgas del control del tráfico aéreo
  • Problemas de seguridad en el aeropuerto
  • Defectos de fabricación no revelados
  • Choques de aves (desde 2017)

Estos eventos son cosas que la aerolínea no puede controlar o evitar. Incluso el COVID-19 se considera una circunstancia extraordinaria. Lo desafortunado de estas circunstancias es que las compañías aéreas pueden citarlas sin tener que brindar una explicación. En ocasiones, también se negarán a ofrecer detalles de una circunstancia extraordinaria para frustrar el proceso de reclamación. No obstante, cada aerolínea está obligada a proporcionar dichos detalles cuando recibe una solicitud del organismo nacional de ejecución.

¿Qué no se considera como circunstancia extraordinaria?

EU Flight Compensation Extraordinary Circumstances Explained

Algo que puede que pienses que entra en el ámbito de las «circunstancias extraordinarias»,  puede resultar no tan extraordinario. Si el retraso o cancelación se debe a una de las siguientes situaciones, podrías tener derecho a una indemnización según la (CE) 261. Entonces, ¿qué no son circunstancias extraordinarias?

  • Cualquier problema con el personal de la aerolínea(p.ej.,  poco personal o retraso de los miembros de la tripulación)
  • Mal clima que afectó a un vuelo anterior
  • Denegación de abordaje por sobrecupo del vuelo
  • Problemas técnicos del avión, salvo los ocasionados por defectos de fabricación ocultos
  • Relámpagos
  • Falta de documentación requerida para el vuelo
  • Inspecciones de seguridad

Sin lugar a duda, el aspecto más difícil a evaluar de un retraso o cancelación de vuelo es el clima adverso. Ciertos tipos de clima pueden estar bajo la categoría de «circunstancias extraordinarias». Estas incluyen eventos como ceniza volcánica o desastres naturales. Sin embargo, las malas condiciones meteorológicas, como los relámpagos, no pueden considerarse como extraordinarios puesto que son inherentes al ejercicio normal de la actividad del transportista. La nieve, el hielo, la neblina y otros eventos similares quedan a interpretación. Si no estás seguro, puedes reclamar y ver qué dice la aerolínea.